A veces, una de las grandes frustraciones de los propietarios o dueños de mascotas, es que saben que todos los días deben sacar a su perro a pasear, explorar, hacer sus necesidades, pero incluso son ellos mismos los que se resisten a salir de casa y pasear más de 50 metros. O bien, todo lo contrario! Salen de paseo como caballos desbocados y no quieren volver casa. Cualquiera de estos casos nos muestra que ellos tienen ahora el control de la situación y aunque no queramos aceptarlo, son ellos los que están imponiendo las reglas y nosotros nos comportamos como sus fieles seguidores.
Te invitamos a hacernos conscientes de que incluso en esta materia de manejo canino, por parte de los dueños: la práctica hace al maestro. Así como en muchas otras situaciones, cuando practicamos algún ejercicio de adiestramiento con nuestro perro, hay veces en que responde de inmediato a lo que le pedimos, y en otros casos simplemente nuestro perro hace como que no existimos. Qué hace la diferencia entonces?
Si bien, podemos practicar todos los días alguna disciplina, no cualquier tipo de práctica conduce al progreso.
Podemos dividir nuestra práctica en dos tipologías:
- Práctica Ingenua: Es aquella que consiste únicamente en dedicar tiempo a algo, sin criterio. Por muchas horas que consagremos algo, si lo hacemos de forma ineficaz o incluso equivocada, el progreso no será el deseado.
- Práctica con Propósito: Es la que tiene un plan bien diseñado para lograr el objetivo. Si queremos que nuestro perro nos acompañe a pasear cuando corremos, tendrá un objetivo diferente a su paseo de liberación de energía o también diferente, si el objetivo es un paseo higiénico, para hacer sus necesidades fuera de casa.
Lo principal es establecer metas de las acciones que quiero llevar a cabo con mi perro, y lo más importante, concretarlas. De este modo sabremos qué pasos dar y en qué dirección para lograr el objetivo.
Otro punto importante, es estar totalmente concentrado. Si hablo por teléfono o estoy planificando mi reunión de mañana en la oficina mientras paseo a mi perro, poca o nada conexión y entendimiento lograré del medio ambiente y mi perro. Estar concentrados en lo que hacemos, nos permite adaptarnos a las diferentes situaciones y problemas sin perder el foco.
Siempre es importante pedir feedback o retroalimentar mis acciones, ya sea con otro integrante de la familia o algún profesional del área canina que pueda sumar prácticas positivas o nueva información para lograr que los paseos y el manejo de mi perro sea el adecuado.
La práctica consciente de sacar a mi perro es una responsabilidad. Es un momento clave para establecer liderazgo de forma positiva, generar vínculos, reforzar límites y establecer disciplina. Los perros adoran seguir a líderes asertivos (y quién no?, cierto?).
Si quieres saber más sobre las estructuras de paseo con tu perro, tipos de paseo y herramientas para lograr un buen paseo, no olvides dejar tus comentarios en los post de RRSS para seguir avanzando. No solo tu perro te lo agradecerá sino también tu cuerpo, mente y calidad de vida.
