¿Qué es el agotamiento por calor en perros y cómo prevenirlo?  

Actualidad

El verano es sinónimo de vacaciones, relajo y entretención bajo el sol, pero las temperaturas elevadas pueden poner a tu perro en riesgo de sufrir un agotamiento por calor. Para asegurarte de que toda tu familia de cuatro patas está a salvo y fresca este verano, te contamos cómo prevenir, detectar y tratar el golpe de calor. 

 

¿Qué es el agotamiento por calor? 

 

Agotamiento por calor o hipertermia ocurre cuando la temperatura corporal de tu perro se eleva por sobre el rango saludable siendo incapaces de auto regular su propio calor corporal. Esta condición va desde un agotamiento por calor suave, que puede ser tratado en casa, a un golpe de calor severo, en cuyo caso tu mascota puede perder el conocimiento, tener alta temperatura, o incluso sufrir insuficiencia orgánica. 

Debido a que los perros jadean en vez de sudar, son mucho más sensibles al calor que los humanos.  Felizmente, es muy simple prevenir el agotamiento por calor y así asegurar un verano feliz para todos. 

 

Cómo prevenir el agotamiento por calor 

 

1. Nunca dejes a tu perro dentro del auto estacionado. Ni siquiera por un minuto. Ni aunque dejes las ventanas un poco abiertas. Cada año, cientos de perros dejados dentro de autos estacionados sufren golpes de calor y mueren. ¡Recuerda que tu perro es más sensible que tú al calor!  

En un día de 27 grados Celsius de calor, la temperatura dentro de un vehículo estacionado puede subir a 38 grados Celsius en 10 minutos. Si la temperatura es de 32 grados, puede llegar a 43 grados en 10 minutos dentro del vehículo, y a los 30 minutos ya puede haber subido a 54 grados. Esto puede ser fatal.    

 

2. Asegúrate de que tu perro no pase mucho tiempo afuera. Si tu perro pasa demasiado tiempo al exterior, asegúrate de que tenga suficiente agua y un lugar a la sombra para descansar. Mantenlo dentro de casa durante las horas peak de calor.  

 

3. Evita caminar con tu perro durante las horas peak de calor. En lo posible, camina con tu perro temprano en la mañana o por la tarde para evitar las horas de más calor. Siempre lleva agua en los paseos largos y toma descansos bajo la sombra cada vez que lo necesiten. Considera hacer caminatas más cortas y evita subir colinas o cerros empinados y otras áreas que requieran de mayor esfuerzo agotador. 

 

4. Mantén tu casa fresca Utiliza ventiladores en distintas partes de tu hogar y en caso de utilizar aire acondicionado, mantenlo encendido incluso si sales. Al igual que en un auto estacionado, la temperatura dentro de una casa cerrada puede subir con rapidez. 

 

5. Asegúrate de que tu perro tenga suficiente agua. El único lugar donde los perros tienen glándulas sudoríparas es en las almohadillas de sus patas, por lo que regulan su temperatura corporal  través del jadeo, descanso y la ingesta de agua. Siempre mantén su plato lleno de agua fresca!  

 

6. Deja a tu perro en un hotel canino si sales de vacaciones A pesar de que puede ser tentador dejar a tu perro en casa y tener a alguien que vaya a verlo algunas horas al día, esto puede ser peligroso durante el verano. Incluso dejarlo al cuidado de algún familiar o amigo puede ser riesgoso si no están informados acerca de los riesgos del agotamiento por calor. Un hotel canino te dará la seguridad de darle la atención necesaria y mantenerlo fresco durante los meses más calurosos.  

 

7. Conoce la historia médica de tu perro. Si tu perro es senior o si tiene alguna condición al corazón, obesidad o problemas respiratorios, es aún más imperativo mantenerlos frescos. 

 

¿Cómo detectar el agotamiento por calor? 

 

Debes estar atento a estos síntomas comunes de agotamiento y golpe por calor: 

 

1. Jadeo excesivo o dificultad para respirar. Si tu perro jadea constantemente o más rápido de lo normal (hiperventilación), puede que esté sobre acalorado. Los perros con hocicos planos, como los pug, son más susceptibles al agotamiento por calor, ya que no pueden jadear de forma eficiente. 

 

2. Deshidratación. Señales de deshidratación incluyen una nariz seca, cansancio visible, jadeo excesivo y ojos hundidos.  

 

3. Babeo excesivo. Ojo con los jadeos excesivos, o que sea más espeso y pegajoso que lo habitual. 

 

4. Fiebre. Si la nariz de tu perro está seca y caliente en vez de húmeda y helada, puede que tenga fiebre. Una temperatura sobre los 39 grados es considerada anormal. 

 

5. Encías azuladas, moradas, grises o rojo claro. Si las encías de tu perro son de un color distinto al normal, puede que esté deshidratado. 

 

6. Problemas para orinar. Si tu mascota tiene problemas para orinar, puede que esté deshidratado o muy acalorado.  

 

7. Pulso rápido. La forma más fácil de revisar el pulso de tu perro es poner tu mano en su pecho cerca de la articulación delantera del codo. Si su pulso parece elevado, puede que esté con exceso de calor. El pulso normal va a depender del tamaño de tu perro. Los perros más grandes tienen pulso más lento que los perros más pequeños y que los  cachorros, los que tienen un pulso rápido. 

 

8. Temblores musculares. Si tu perro está temblando a pesar de la alta temperatura, esto puede ser causado por un agotamiento por calor.  

 

9. Letargo o debilidad. Letargo puede causar que tu perro tome más siestas de lo común o tenga problemas para levantarse y caminar. 

 

10. Vómitos y diarrea. Heces muy blandas, o con sangre, es una gran señal de advertencia del agotamiento por calor.  

 

11. Mareos. Si tu perro tiene problemas para caminar en línea recta o se mantiene chocando contra los muebles, puede que se encuentre mareado debido a una deshidratación o golpe de calor. 

 

Estos son los síntomas más comunes para detectar el agotamiento por calor, pero existen muchos más.  Si tu perro está actuando de cualquiera de estas formas o simplemente de forma distinta a lo común, ¡no lo ignores!  

En caso de duda, contacta a tu Médico Veterinario. Mantener a tu perro sano y a salvo es lo más importante. 

 

Cómo tratar el agotamiento por calor: 

 

  1. Lleva a tu perro a un lugar fresco y sombreado de forma inmediata (de preferencia al interior).
  2. Baja la temperatura de su cuerpo mojándolo con agua fresca. ¡No usar agua helada! Parece contradictorio, pero enfriar el cuerpo de forma muy rápida puede ser tan peligroso como el agotamiento por calor. Para perros muy pequeños o cachorros utiliza agua tibia. 
  3. Aplica más agua fresca alrededor de sus orejas y en sus patas. Esto ayuda a reducir la fiebre. 
  4. Déjalo que se seque con el aire de un ventilador. Si puedes, toma su temperatura cada ciertos minutos. Una vez que la temperatura haya bajado a 39 grados retira el ventilador y deja de aplicar agua.
  5. A medida que se va enfriando, dale agua fresca o tibia para que vaya tomando de forma lenta. Nuevamente, ¡no darle agua helada ni agregar hielo!  

6. Llama a tu Médico Veterinario lo antes posible. Incluso si tu perro da señales de estar recuperándose, puede necesitar ser monitoreado por posible shock, deshidratación, falla renal, y otras posibles complicaciones provocadas por el agotamiento por calor. Tu veterinario podrá guiarte en los siguientes pasos. . 

Si tu perro pierde la consciencia o presenta vómitos o convulsiones llévalo a una Clínica Veterinaria de inmediato. 

 

El verano puede ser  muy entretenido para ti y tus mascotas, sólo se necesita de un cuidado especial y extra atención.  

Agregar un comentario

Su dirección de correo no se hará público. Los campos requeridos están marcados *